10 de enero de 2019
Una vez más los responsables de la compañía buscan solucionar de una manera fácil su incapacidad demostrada y reiterada para la toma de decisiones estratégicas acertadas.
La mala gestión de la compra de ONO, el proyecto frustrado de fusión societaria de ambas compañías, la renuncia al fútbol, el retraso en las instalaciones a cliente, el abandono del despliegue de fibra y la dependencia de Telefónica, la contratación de gran cantidad de personal a pesar de la situación, el desastre del cambio de sistemas, …
En definitiva, los continuos errores de gestión y estratégicos cometidos a lo largo de estos tres últimos años junto con la agresiva competitividad del sector nos han llevado a esta situación que ahora se pretende paliar principalmente reduciendo plantilla. Ni más ni menos que 1.200 compañeros, más del 23% de plantilla.
De nuevo la dirección de la compañía demuestra su incompetencia para encontrar soluciones a la situación que ha generado y elige el camino fácil que es la reducción de personal.
UGT, organización sindical mayoritaria en VODAFONE, rechaza frontalmente esta medida. Esta situación no es responsabilidad directa de la plantilla, sino de los gestores de la compañía, y por ello nos parece indecente que se plantee de nuevo un recorte de personal cuando además hace apenas tres años se produjo el último.
Todos sabemos que tras un ERE se empieza a contratar de nuevo, como ya ha sucedido en ocasiones anteriores, hasta alcanzarse niveles similares de plantilla. Además de nuevo hay un nivel importante de personal externo que realiza funciones de internos y compañeros que realizan muchísimas horas extraordinarias.
Todo esto nos indica que la reducción de personal no es la solución, más bien parece utilizarse como una forma rápida de reducir gastos de forma coyuntural para salir bien en la foto y de paso renovar la plantilla.
Por tanto, en UGT nos oponemos a cualquier medida forzosa que pueda afectar al empleo en VODAFONE e instamos a la compañía a buscar soluciones imaginativas que cumplan las expectativas de ambas partes, plantilla y empresa.