El Plan de Retorno pactado con Telefónica, inicialmente previsto para el 1 de septiembre en el Grupo, y para el 14 y 28 en las empresas del CEV (FC y DC, respectivamente) excluyendo al personal sensible de riesgo, se confeccionó bajo la premisa de ir ajustándose en función de la evolución de la pandemia y siempre bajo la primacía de la seguridad de las personas trabajadoras, por encima de cualquier otro interés.
Es evidente que la evolución del Covid19 no está siendo la deseada. El índice general de contagios se sitúa en máximos, mientras que en muchos lugares se detecta trasmisión comunitaria sin un control aparente.
UGT es plenamente consciente de todas estas circunstancias y está analizando todos los escenarios posibles.
La apertura de los colegios es una de nuestras principales preocupaciones. Hasta que la actividad escolar comience y se estabilicen las modalidades de impartición, existe un elevado grado de incertidumbre que es preciso tener muy en cuenta. Por ello hemos trasladado a la empresa que tanto los turnos de trabajo como la flexibilidad horaria deberán amoldarse a cada familia, teniendo en cuenta cuestiones tan importantes para la conciliación como los turnos de entrada y salida de los menores, si tienen clases presenciales o virtuales y, por supuesto, qué hacer en caso de rebrotes que impliquen suspender las clases.
El transporte público está también entre las cuestiones a las que más atención estamos dedicando. Las directrices sanitarias recomiendan el uso de transporte privado. Por ello hemos trasladado a la empresa la necesidad de asegurar una máxima disponibilidad de plazas de parking (allí donde contemos con ellas) y que se tenga en cuenta aquellos casos en donde el desplazamiento de la persona trabajadora requiera de un largo trayecto mediante transporte público.
Finalmente, tendremos que contemplar las circunstancias particulares en función del tamaño y alcance de los brotes, que requerirán una respuesta rápida y específica para cada caso, en virtud de cómo evolucione la pandemia en cada CCAA, provincia, población o incluso barrio.
Por todo ello, hemos trasladado a la empresa una serie de peticiones, que consideramos imprescindibles para mejorar la seguridad en el regreso a las oficinas, aumentando al máximo las garantías y la flexibilidad:
- El turno de presencia en la oficina (de carácter semanal en CEV y por días en otras empresas del Grupo) debe flexibilizarse en función de las necesidades de conciliación de cada persona trabajadora. Por ello, exigimos que hasta un día del periodo presencial, equivalente al 20% de dicha jornada presencial, pueda realizarse en teletrabajo. Este porcentaje deberá poder fraccionarse en horas sueltas, o acumularse hasta la jornada completa, a elección de cada persona trabajadora.
- Para mitigar la incertidumbre por el inicio de las clases, en el caso de tener menores escolarizados, solicitamos poder retrasar el regreso a la oficina hasta que el curso haya dado comienzo en su respectiva CCAA.
- En el caso de darse eventualidad de rebrote en el centro educativo del hijo de un empleado, que éste pueda pasar a teletrabajar a tiempo completo hasta que finalice las medidas sanitarias impuestas.
Nuestro objetivo irrenunciable es proteger la salud de las personas trabajadoras. Por eso, a lo largo de esta pandemia, siempre hemos tomado nuestras decisiones en función de tres principios básicos: precaución, vigilancia y máximas garantías.
Vamos a seguir por este camino, valorando todas las opciones, manteniéndonos vigilantes y atentos en el seguimiento pormenorizado de la evolución de la pandemia bajo una clara convicción: Allí dónde no se den las máximas garantías, exigiremos una revisión del plan de retorno, tanto en fechas como en porcentaje de personas.
En UGT lo tenemos muy claro: la salud de todos por encima de todo.