Las redes de fibra óptica (especialmente FTTH) que nuestros operadores han -y siguen- desplegado continúan destacando como unas de las más capilares de Europa y el mundo. Así se desprende las últimas publicaciones del FTTH Council Europe1https://www.ftthcouncil.eu/, que sitúa a nuestro país entre los más punteros en cuanto a infraestructuras digitales de vanguardia, tanto en ámbitos urbanos como rurales.
Por ejemplo, en el ranking mundial de penetración de fibra (que suma FTTH y FTTB, mucho menos eficiente que la primera2http://www.fibresplitter.com/news/what-is-fttb-37550834.html), España se coloca en un más que honroso 13º, siendo la primera nación europea:
Y si ponemos el foco en Europa, acreditamos un asombroso 89% de hogares pasados por fibra, prácticamente empatados con Letonia, un país que como ya hemos comentado en ocasiones anteriores, apenas tiene dos millones de habitantes en una extensión geográfica menor que la de Castilla La Mancha. Nótese que el propio organismo destaca a aquellos países que han superado el 50% de hogares cableados, cuando nuestras redes ya rozan el 90%:
Además, nuestro despliegue es muy homogéneo entre zonas urbanas y rurales. El siguiente gráfico describe a la perfección como se puede ser una potencia en fibra “global” (por ejemplo, Portugal o Bulgaria) y luego no disponer de huella en zonas rurales. No es el caso de España, que también está en pódium europeo de fibra rural:
Finalizamos este breve resumen con las previsiones a medio plazo. De nuevo España vuelve a destacar. Para 2022, nuestro crecimiento en despliegue será el segundo de Europa, lo que nos situará en un lugar privilegiado muchos años antes que otras potencias europeas como Alemania y el Reino Unido. En 2027, obviamente si ya has completado casi todo el trabajo, nuestro crecimiento comparativo es sensiblemente menor:
