El plus de convenio de 300 € que percibiremos en la nómina de este mes, evidencia una vez más la eficacia del II CEV que recientemente hemos conseguido prorrogar hasta el 31 de diciembre de 2022, proporcionándonos un incremento económico aún a pesar de las dificultades de la Pandemia o las circunstancias económicas y laborales, compensando el esfuerzo que hemos venido realizando en un escenario plagado de dificultades. Además, 150 euros son consolidables formando parte de la masa salarial a efectos del cálculo para el incremento salarial de 2022.
Además, la oportuna cláusula de salvaguarda económica pactada mediante el compromiso de revisión salarial nos mantiene protegidos ante la actual tendencia alcista del IPC, apoyada principalmente en la desbocada subida de la energía y materias primas.
Recordemos que, “si al finalizar la vigencia del Convenio, incluida su prórroga, el IPC real acumulado de todo el periodo fuera superior a los incrementos pactados de la masa salarial global ambas partes se comprometen a revisar las tablas salariales con efectos de 1 de enero de 2023 para garantizar que no se produzca pérdida del poder adquisitivo en este periodo”.
Habrá quien insista en querer restar importancia a estos logros y que intentará desprestigiar nuestra capacidad de anticipación a los problemas que venimos sorteando mediante trabajo constante y capacidad de negociación, en defensa de los intereses de todas las personas trabajadoras de nuestras empresas, pero la realidad es tozuda y viene a demostrar, una vez más, sólo gracias al esfuerzo negociador que hemos venido desarrollando en estos años, previendo los profundos cambios en el sector que indudablemente afectarían a nuestras condiciones laborales, hemos sido capaces de establecer un modelo de relaciones laborales que oportunamente da sus frutos cuando es necesario, adaptándose además a cada circunstancia, por imprevista que esta sea, como se ha demostrado durante la crisis económica o la actual pandemia.
Nuestro CEV nos proporciona estabilidad salarial, incremento económico y garantía de mantenimiento de poder adquisitivo gracias a las cláusulas que UGT mantuvo a ultranza durante la negociación. En un momento en el que la economía se resiente y la inflación amenaza, es oportuno poner en valor el acierto y oportunidad de lo firmado.