El 28 de marzo AST ha consumado en el SIMA su despropósito, ratificándose en su demanda contra los acuerdos que, en diciembre de 2015, dieron solución al largo contencioso del Seguro de Sueldo, mediante la contratación, a cargo de los fondos existentes, propiedad de los trabajadores activos de TdE, de tres pólizas con Antares, dos que permiten cubrir todas las eventualidades del Seguro de Sueldo, para los que ya lo percibían y para toda la plantilla de TdE activa a 31 de diciembre de 2015, y una tercera que da utilidad al remanente de capital existente una vez cubiertas las otras dos anteriores, que de otra forma quedaría inerte e inútil, proporcionando una cobertura dental de reembolso, de hasta 626 € al año, para cada trabajador/a y sus beneficiarios incluidos en su cartilla de la seguridad social.
Con esta demanda AST pretende conculcar los acuerdos adoptados hace más de un año en el seno del CI, despreciando como siempre la democracia cuando su resultado no se ajusta a sus postulados que, por otra parte, no van a ninguna parte, puesto que, recordemos, durante los más de dos años que en el seno del CI se debatió la cuestión del Seguro de Sueldo y los más de cuatro meses que estuvo operativa la Comisión específica para tratar este tema, no presentaron propuesta alguna, limitándose a denostar las aportaciones de los que desde el principio hemos buscado soluciones.
En ese despropósito AST se ha visto acompañada por CGT, que se ha adherido a la demanda, en “coherencia” con su idéntica actitud de entorpecer y calumniar cualquier planteamiento ajeno, sin plantear soluciones propias.
Paradójicamente, quienes representan en el SIMA a ambos sindicatos en su intento de desmantelar los acuerdos que solventaron el Seguro de Sueldo y nos proporcionaron la póliza dental, no son trabajadores activos de TdE desde hace tiempo, por lo que nunca serían beneficiarios de ninguna de las tres pólizas en discusión que pretenden abolir, ni tampoco se servirían del Seguro de Sueldo original al que pretenden que volvamos, al no cobrar ya salario como activos. |
En cuanto a STC, ni frío ni calor, ya que se abstuvo el acto de conciliación en el que, por otra parte, los sindicatos demandantes dejaron claro que “rechazaban cualquier arbitraje” e intento de solución, manifestando que “no pararían hasta que alguien acabase en la cárcel”, mostrando la realidad de su talante sectario, destructivo, alérgico al diálogo e incapaz de articular propuestas.
Además, al margen de las argumentaciones pretendidamente jurídicas que ambas organizaciones invocan para intentar justificar su oposición al acuerdo adoptado en su día, que ha dado solución al Seguro de Sueldo y ha proporcionado la ventaja añadida de la póliza de reembolso dental, dando utilidad a un capital inmovilizado durante años, la realidad es que, de ganar en sus pretensiones y tener que volver a la situación de partida, como exigen, se daría el absurdo de retrotraernos a una situación que era inviable jurídicamente y que precisamente por ello había que solventar.
En una nueva vuelta de tuerca de la ignorancia de quienes nunca asumen responsabilidades a la hora de plantear soluciones, lo que realmente reclaman es volver a una situación de inseguridad jurídica, que precisamente era legalmente insostenible, y en el “camino” echar por tierra los avances obtenidos, despojando al mismo tiempo a los trabajadores/as de TdE de la póliza de reembolso dental para ellos y sus beneficiarios.
UGT ha defendido en el SIMA la plena validez y legalidad de los acuerdos adoptados, y los defenderá en los tribunales cuando corresponda, frente al revanchismo intolerante de quienes dicen defender los intereses los trabajadores/as limitándose a entorpecer y poner en peligro todos aquellos acuerdos que otros hemos sido capaces de poner en marcha con responsabilidad, coraje y esfuerzo.