Las reclamaciones que se están resolviendo en las distintas mesas electorales, motivadas por la obstinación de CCOO en no aceptar la decisión de estas e insistir en componer dos colegios electorales y relegar al colegio 2 a los OC, Operadores Audiovisuales y Delineantes, están dando como resultado el pronunciamiento de los árbitros de elecciones sindicales de que los trabajadores y trabajadoras de Telefónica somos todos del colegio 1, de Técnicos y Administrativos.
Así, en ocho de las nueve impugnaciones – Albacete, Burgos, La Coruña, León, Lérida, Tarragona, Valladolid y Zaragoza – el arbitraje se ha pronunciado por el colegio único, con lo que la mayoría de los sindicatos de TdE, excepto CCOO, y ahora también la mayoría de los árbitros de elecciones sindicales provinciales, coincidimos expresamente en reconocer la alta cualificación de los trabajadores y trabajadoras de TdE, ganada con esfuerzo, profesionalidad y capacidad de adaptación al mundo digital en el que desarrollamos nuestro trabajo.
“… Resultaría del todo inoportuno dividir a los trabajadores en dos colegios y sobre todo adscribir a trabajadores que no ostentaban esa categoría ni esa cualificación profesional al hipotético colegio de especialistas y no cualificados puesto que ningún trabajador de la plantilla ostenta tal categoría laboral…” (Laudo 98-19 Albacete)
Las sucesivas resoluciones provinciales han demostrado la sinrazón de CCOO al menospreciar a un colectivo muy numeroso de trabajadores y trabajadoras, desmontando sus extravagantes argumentos, mientras se permitían además acusarnos públicamente de “intentar engañar”, y que invocaban una presunta legalidad que en realidad han retorcido para intentar justificar su posicionamiento, comprobándose que:
- La tan invocada sentencia del Tribunal Supremo no establece obligatoriamente la constitución de dos colegios, y mucho menos que el Grupo IV haya de estar incluido en el colegio 2 (laudo de Coruña 31-L/19).
- El laudo de Pontevedra de 2015 no tiene fuerza vinculante, como demuestran los de las ocho provincias reseñadas y explicita el laudo de León, señalando que el de Pontevedra es un laudo aislado, habiéndose dictado otros más recientes con un criterio distinto.
Debemos celebrar por lo tanto que en la mayoría de las provincias las elecciones serán en un único colegio electoral, como en TdE en el 2015 y en TME y TSol, reconociendo que todos los trabajadores/as de TdE somos del colegio 1.
A partir de aquí, cualquier sindicato responsable haría lo posible por concluir el proceso electoral y abrir cuanto antes la negociación del II CEV, para despejar las dudas que generan la inminente caducidad de la ultraactividad del I CEV o la falta de acuerdos que regulen y moderen el impacto que la digitalización y la robotización de procesos pueden generar sobre nuestro inmediato futuro laboral.
Desde UGT deploramos que se haya desoído nuestro llamamiento a aceptar y respetar los laudos arbitrales que se están dictando y renunciar a cualquier impugnación para evitar la judicialización del proceso electoral, que provocará un peligroso retraso en la necesaria negociación del II CEV, tanto por la dificultad de componer la mesa negociadora como por la incertidumbre generada, ya que la empresa nunca se sentará a negociar con una representación sindical inestable en cuanto a su composición.
Lamentablemente, y a la espera de que no se extienda a más provincias, entrando al peligroso y absurdo proceso generado por CCOO, ya es inevitable la judicialización del proceso electoral, por las impugnaciones de A Coruña y Vizcaya, poniendo absurdamente en riesgo el inicio de la negociación del II CEV.
En todo caso, las decisiones arbitrales han desmontado las falsas argumentaciones esgrimidas por CCOO, y que dieron lugar a todo este lío innecesario, respecto a la presunta obligación de establecer dos colegios o que los OC, Operadores Audiovisuales y Delineantes debían estar en el colegio de especialistas y no cualificados, haciendo una ofuscada interpretación de la legislación y desoyendo todas las voces que razonábamos lo contrario, y dejando en el aire muchos interrogantes:
¿A qué ha venido generar una polémica artificial sobre la composición de los colegios electorales, menospreciando en el proceso a los OC, Operadores Audiovisuales y Delineantes, al pretender encuadrarlos en un colegio donde nunca han votado en el pasado, desmereciendo sin miramientos su capacitación técnica, su formación y su esfuerzo de adaptación a los desafíos tecnológicos de nuestra empresa?
¿Por qué en TME o TSol, empresas del CEV, se puede votar en un único colegio electoral y en cambio en TdE se ha pretendido generar artificialmente un colegio 2 con los OC, Operadores Audiovisuales y Delineantes?
¿Por qué CCOO ha impugnado la decisión del colegio único en unas provincias y no en otras, evidenciando una incomprensible incoherencia con su posicionamiento previo de dos colegios en todas ellas?
¿Va a trasladar CCOO esta equívoca y errática orientación, contraria a la voluntad e intereses de la mayoría de los trabajadores y trabajadoras, a la negociación colectiva en la que tanto nos jugamos?
Demasiados interrogantes aún, cuando precisamente los trabajadores y trabajadoras de Telefónica necesitamos lo contrario: la concreción, estabilidad, claridad de ideas, seriedad, responsabilidad y capacidad para negociar que caracterizan a la UGT.