Malas noticias, realmente malas. De las que nunca agrada ni comentar ni transmitir: el volumen de empleo en nuestro sector cae a su cifra más baja desde que se tienen registros.
Así se desprende del Informe Económico Sectorial de Telecomunicaciones y Audiovisual del ejercicio 20191https://www.cnmc.es/expedientes/estadcnmc00320, liberado por la CNMC hace escasas fechas. En el pasado más cercano, entre 2018 y 2019 se perdieron 2.477 puestos de trabajo. En perspectiva histórica, se han perdido 40.000 empleos desde el punto más álgido (1998, justo antes de la liberalización del mercado europeo de las telecomunicaciones), lo que supone un 41% menos del volumen total de empleo en dos décadas:
Esta trayectoria descendente, a pesar de ser largamente denunciada2http://www.ugtcomunicaciones.es/wordpress/informe-cuarto-trimestre-2019-sector-comunicaciones-el-empleo-se-desmorona/; http://www.ugtcomunicaciones.es/wordpress/informe-primer-trimestre-2019-sector-comunicaciones-estancamiento-en-ingresos-y-empleo/; http://www.ugtcomunicaciones.es/wordpress/cnmc-y-telecos-menos-excusas-y-mas-implicacion-con-el-empleo/; http://www.ugtcomunicaciones.es/wordpress/subastas-de-frecuencias-5g-donde-esta-el-empleo/; http://www.ugtcomunicaciones.es/wordpress/2018-en-nuestro-sector-menos-ingresos-menos-empleo/; http://www.ugtcomunicaciones.es/wordpress/ugt-exige-a-europa-que-mire-al-empleo-cada-vez-que-regula/por UGT, no deja de ser alarmante y dramática.
En un sector (al fin) reconocido como esencial para la subsistencia de la economía, imprescindible para un crecimiento sostenible y clave como muro de contención ante futuras crisis económicas o sanitarias, es inconcebible esta sangría de puestos de trabajo. Personas y familias que pierden empleos de calidad, dignos, con buenos salarios, con derechos. Empleo de ese tipo que tanto se dice buscar ahora: tecnológico y cualificado. Sin embargo, reguladores, legisladores, gobernantes y políticos siguen mirando hacia otro lado ante este drama social, laboral y económico.
La regulación ineficiente, volcada en bajar precios a toda costa (en lo que va de 2020, el IPC de las comunicaciones desciende un -1,2%; en la última década los precios de las telecos han descendido un -11,5%); la poca altura de miras de legisladores y reguladores, que ejercen una gobernanza sectorial que ignora el factor trabajo (¿dónde están las memorias de empleo cada vez que estipula una norma, una ley, un dictamen, por parte de la CNMC o el Gobierno?); y, en los últimos años, un mercado bursátil antinatural, que premia a gigantes extranjeros que parasitan por nuestras redes y pagan sus impuestos en paraísos fiscales, mientras se castiga al resto, salvo que se pueda especular con la venta de sus activos (torres3https://cincodias.elpais.com/cincodias/2020/04/22/companias/1587582008_088340.html; https://www.abc.es/economia/abci-crisis-y-disparan-fiebre-torres-telecomunicaciones-202008180145_noticia.html, redes de fibra, filiales o lo que sea), que a veces se valoran más que las compañías verticales, que incluyen a millones de clientes en activo.
A pesar de ser reconocidos como un sector esencial durante la crisis, los ingresos de nuestros empleadores descendieron casi un 5%4https://www.eldiario.es/tecnologia/las-telecos-ingresaron-un-4-7-menos-en-el-confinamiento-pese-a-usarse-mas_1_6143206.amp.html. A pesar de que cada vez gestionamos a más clientes y más tráfico, la recaudación sigue en picado5https://elpais.com/economia/2020-04-21/la-eterna-frustracion-de-las-telecos-cada-vez-mas-lineas-pero-los-mismos-ingresos.html. Mientras en EEUU o Asia las operadoras tienden a concentrarse para ganar estabilidad y músculo, en Europa no hacemos otra cosa que debilitar nuestro potencial multiplicando los competidores de forma artificial (OMV, OTT, obligaciones de alquiler de redes y contenidos a precio tasado, cortapisas constantes para fusionarse6https://www.moodys.com/login?ReturnUrl=http%3a%2f%2fwww.moodys.com%2fviewresearchdoc.aspx%3fdocid%3dPBC_1231573%26lang%3den%26cy%3dglobal) . Una cadena de erráticas prácticas regulatorias y legislativas que generan un daño terrible para las personas trabajadoras, laminando uno de sus bienes más preciados: un empleo digno.
UGT continuará denunciado esta inexplicable situación ante todos los entes concernidos. Tanto en Europa como en nuestro país. Acudiremos a todas las consultas públicas (casi siempre, lamentablemente, en solitario; ningún otro sindicato nos secunda); visitaremos a todos los responsables políticos y públicos; denunciaremos en los medios de comunicación esta locura regulatoria y esta indigna y contradictoria destrucción de empleo tecnológico y cualificado.
En definitiva, haremos acción sindical en defensa de nuestro trabajo, quejándonos, pero proponiendo alternativas viables y urgentes. Porque otro modelo7http://www.ugtcomunicaciones.es/wordpress/ugt-defiende-ante-ministro-agenda-digital-modelo-sector-basado-empleo-calidad/de sector es posible…¡y necesario!