Cada vez que hay elecciones sindicales reiteramos los mensajes sobre su trascendencia y la importancia de la participación, hasta el punto de que muchos compañeros y compañeras lo consideran un simple tópico dentro del proceso electoral, pero las elecciones sindicales son imprescindibles. Determinan quién negociará nuestras condiciones laborales, sociales y salariales. Y si establecen el quién, determinan igualmente qué cuestiones estarán presentes en la negociación y cómo se llevará a cabo ésta.
Y ese triple desafío de quién, qué y cómo se negociará tiene distintas respuestas en función del signo del voto que determinen los trabajadores y trabajadoras de Telefónica de España llamados a las urnas en mayo.
UGT concurre una vez más a las elecciones sindicales presentando candidaturas en todas las provincias, con el convencimiento y la ilusión que proporciona nuestro bagaje de acuerdos y convenios que hemos sabido sacar adelante en cada legislatura, y que nos han permitido sortear regulaciones restrictivas, cambios tecnológicos, crisis económicas y reformas laborales con notable éxito, hasta el punto de colocarnos en una situación de cierto privilegio respecto a los trabajadores y trabajadoras del sector y de muchos otros sectores.
Ese éxito, todos lo saben, se debe a una impronta específica de UGT: el análisis y debate previo de los problemas, la búsqueda de soluciones realistas y alcanzables y la negociación de acuerdos que las concreten, buscando siempre garantías que nos permitan avanzar en cada negociación sin menoscabo de las condiciones laborales o económicas de nuestros compañeros y compañeras.
En UGT concurrimos a las elecciones de mayo convencidos de que estamos en el camino correcto. Que el primer CEV ha marcado un antes y un después en nuestro modelo de relaciones laborales y que de su consolidación depende nuestro futuro. Que podemos utilizar la “revolución” digital en nuestro beneficio, adecuando nuestra formación, garantizándonos nuestra empleabilidad, nuestra residencia y desarrollo profesional futuros. Que podemos establecer nuevas formas de trabajar que posibiliten una mejor conciliación de la vida laboral y familiar y que delimiten nuestro tiempo de trabajo y de descanso. Que podemos contribuir a eliminar la desigualdad entre hombres y mujeres y erradicar cualquier discriminación por razón de género o de sexo. Que podemos entrar en el futuro con garantías, usando la tecnología y los cambios en nuestro favor.
Por ello, desde UGT te llamamos a la participación en el proceso electoral y a que con tu voto deposites tu confianza en nosotros. Una confianza que nos permita consolidar las conquistas y los logros y nos habilite para dar respuestas a los desafíos que aún tenemos pendientes: Establecer las garantías de empleo y no movilidades geográficas y funcionales forzosas sobre las que negociar con tranquilidad. Negociar un nuevo modelo de Comercial, que no penalice a los vendedores en función de la tipología del cliente o del territorio en que trabajen. Garantizar la plena actividad en Operaciones en todas las localidades. Obtener una subida salarial que redistribuya los beneficios empresariales entre la plantilla que los hace posibles, mejorando el poder adquisitivo. Diseñar un plan de formación que nos habilite para el futuro digital y garantice nuestro desarrollo profesional… Tú decides.