La última actualización de la Encuesta sobre equipamiento y uso de las TIC en los hogares del INE para el ejercicio 2017[1] nos permite repasar cual es la situación de la Brecha Digital por Edad[2] y el uso de las nuevas tecnologías por parte de los menores españoles[3].
La tendencia es evidente: en trece años, el número de internautas de entre 55 y 64 años ha aumentado un 60%. Pero es necesario prestar atención a qué dato representa la comparativa: en 2004 habla de aquellos que tienen entre 55 y 64 en dicho año, en 2017, ya no están en dicho segmento, sino en el siguiente, e incluso muchos de ellos ya habrán sobrepasado el límite superior que se mide (los 74 años). Del mismo modo, los que ahora se encuentran en dicho tramo de 55-64 años, son aquellos que en 2004 estaban en entre 45 y 54 años.
Si llevamos esta translación a los números, podemos ver cómo la brecha digital entre los internautas de 16-24 años y la de 55-64 años en 2004 se cifraba en un 62%. En 2017, arrastrando estos colectivos a su edad actual, la diferencia se queda en un 52% entre aquellos entre 25-34 años y 65-74 años, sin contar los que ahora ya superan los 74 años. Por tanto, la Brecha Digital por Edad, no se acorta sino que “se traslada” hacia los segmentos de mayor edad.
Pero no solo este dato temporal atestigua que la Brecha Digital por Edad en España no mejora: el marco espacial también lo confirma.
Así, si ponemos a España en el contexto europeo, nuestra posición es realmente decepcionante. Las siguientes gráficas son sintomáticas:
Si ampliamos el espectro a la OCDE, observamos que el diferencial entre los internautas jóvenes y los sénior (de 16-25 años y de 55-74, respectivamente) es de un 46,6%, cuando la media de la OCDE baja al 33,7%. Por poner algunos ejemplos comparativos, este gap entre rangos de edad en el Reino Unido es de un 15%, en Alemania de un 25% y en Francia de un 28%.
España no alcanza la media europea en ningún indicador. Es más, nuestra posición es siempre mediocre y tendente a situarse en el furgón de cola europeo.
Finalmente, la evolución no es tampoco positiva. En anteriores gráficas podemos observar el caso de Francia: partiendo de un porcentaje similar que España, su trayectoria ha sido mucho mejor que la nuestra, mientras que nuestro país solo puede demostrar un recorrido paralelo a la media europea, sin mermar el diferencial en ningún momento.
En conclusión: la Brecha Digital por edad en España no mejora, simplemente muda a nuevos segmentos de edad y, dentro del espacio europeo, no convergemos con la media de la Unión.
UGT Comunicaciones
[1] http://www.ine.es/dyngs/INEbase/es/operacion.htm?c=Estadistica_C&cid=1254736176741&menu=ultiDatos&idp=1254735976608
[2] http://www.smcugt.org/archivos/elementos/2016/no_la_brecha_digital_por_edad.pdf
[3] http://www.smcugt.org/archivos/elementos/2015/el_70_de_los_ninos_de_12_tienen_movil22.pdf