Seguimos viendo como la empresa, unilateralmente, insiste en buscar soluciones no negociadas, e ineficaces, a los problemas derivados de la nueva realidad digital en Comercial, intentando adaptarse a las nuevas necesidades de nuestros clientes sin reconocer, como UGT viene denunciando, que el actual modelo de comercial no puede dar respuestas a las nuevas exigencias digitales sin una remodelación negociada, que atienda las necesidades empresariales pero también los intereses de los trabajadores y trabajadoras del área.
En la última Mesa de Comercial UGT resumía la incapacidad del actual modelo de comercial, creado hace 20 años, con unas condiciones de clientes y de mercado que no tienen nada que ver con el contexto actual, para atender las actuales necesidades de la empresa y clientes y a la vez dar respuesta a los problemas de los trabajadores, que son los que realmente padecen la ineficacia del modelo.
Un modelo, como señalábamos, agotado, ya que la mayoría de los actuales clientes consumen productos paquetizados, lo que hace muy complicada la venta de servicios diferenciados que generen crecimiento, lo que redunda en igual o más trabajo con menos o nulos incentivos para los comerciales, en tanto que los clientes de alto valor o con proyección demandan productos TI, difíciles de gestionar sin una formación adecuada que, hasta la fecha, Comercial no ha sido capaz de instaurar eficazmente, a pesar de los esfuerzos de compañeros y profesores colaboradores.
Un modelo con una resegmentación de clientes centrada solamente en los potenciales TI, que deja a la mayoría de los comerciales de venta presencial con carteras sin posibilidades de cumplir objetivos, sin posibilidad de crecimiento y ante la frustración de una labor ineficaz y baldía.
Un modelo que, huyendo de la negociación en profundidad que propugna UGT, intenta escapatorias bien a través de contrataciones externas o bien a través de CACES masivos que, como señalamos en anteriores comunicados, solo parchean el problema, posponiendo su necesaria solución, haciéndolo además a costa de la proyección profesional y económica de los comerciales, muchos de los cuales renuncian a la carrera comercial hartos de esfuerzos estériles, acogiéndose a la voluntariedad de los CACES más por desilusión hacia el caduco modelo comercial que por convicción.
Un modelo improvisado, incapaz de generar internamente, a través de una previsora planificación formativa, las habilidades necesarias para posibilitar la adaptación de nuestros profesionales al mundo digital, y que busca en el exterior, mediante la contratación directa de RV4, un perfil que todavía no existe en el sector, intentando obtener una figura profesional que, a precio de mercado, combine conocimientos tecnológicos con la experiencia y habilidades de un vendedor, obviando que aquellos se pueden obtener internamente mediante formación, y más en una empresa como la nuestra, y que disponemos de la mejor y más experimentada plantilla de profesionales que el mercado puede ofrecer, de manera que dichas contrataciones resultarían innecesarias de haber mediado una adecuada planificación y gestión previa de la empresa, y suponen además un freno a la proyección interna de nuestros vendedores capacitados.
UGT insiste en que la empresa tiene ante si la solución, aceptando negociar un nuevo modelo de comercial, como el que nuestra organización presentó en solitario en la última Mesa de Comercial, en previsión de esta situación y partiendo de la idea del agotamiento del actual sistema. Nuestro modelo, presentado como plataforma de negociación y abierto a planteamientos alternativos, busca una simplificación de la figura del vendedor, establecida en torno a actividades concretas (apoyo, tele atención y venta presencial) y con gratificaciones fijas, que absorban, en la medida de lo posible, el actual salario variable, y que en todo caso estén incentivadas mediante SDO, una vez demostrado que los incentivos comerciales son cada vez más difíciles de alcanzar y están sujetos al arbitrio de los territorios, posibilitando y facilitando así la movilidad interna e interprovincial minimizando la merma retributiva, y con una formación continua reglada, de forma que todos los comerciales puedan acoplarse en la actividad más acorde con sus intereses y capacidades sin pérdida de derechos ni impedimento para su desarrollo profesional.
Por ello, UGT demanda a la empresa que, conteniendo la implantación de nuevos CACES y la contratación de RV4 externos, acepte una negociación, en el marco del futuro CEV, que dé solución definitiva, mediante la remodelación del actual modelo de comercial, a los problemas del área sin menoscabo de los intereses económicos y laborales de nuestros profesionales.