Nadie duda que la pandemia, pero especialmente el periodo de confinamiento de la mitad de 2020, ha cambiado la percepción sobre la utilidad y alcance de las videollamadas como herramienta de comunicación. Hasta tal punto ha sido así que compañías que se dedican exclusivamente a vender estos productos han aumentado su valor en múltiplos1https://www.baenegocios.com/negocios/Zoom-volvio-a-reportar-ganancias-extraordinarias-gracias-a-la-pandemia-20210601-0136.html.
Este cambio de percepción ha sido analizado por la CNMC en su Panel de Hogares, correspondiente al cuarto trimestre de 20202https://www.cnmc.es/prensa/panel-hogares-comunicacion-tradicional-ott-cnmc-20210604. Y si bien los resultados confirman la tendencia al alza en el uso de videoconferencias, los datos son mucho más moderados de lo que cabría esperar por los titulares que acapara o por el aumento de valor bursátil.
Así, mientras que a finales de 2019 un 42% de los encuestados confesaba no efectuar llamadas de video, en 2020 este porcentaje caía hasta el 26%. Un ascenso apreciable, aunque si se observa el uso de estas soluciones de forma “habitual”, la tendencia no es tan acusada: un 18,6% hace videollamadas casi todos los días o varias veces al día, por el 14,4% que lo hacía en 2019. O, dicjo de otro modo, hay más gente que usa el video, pero no de forma frecuente:
Llamadas o vídeo llamar por Internet (Whatsapp, Skype, etc.)
Otros servicios de comunicaciones “clásicos” presentan una evidente tendencia a la obsolescencia. Por ejemplo, llamar por teléfono fijo ha pasado de un 21% de personas que no lo usaba “nunca” en 2019, al 32% de 2020. Casi el 60% de los preguntados nunca envía SMS, ratio que continúa casi imperturbable desde hace un lustro.
Además, la satisfacción con los servicios de videoconferencias tampoco resulta especialmente destacados. Un 15% muestra desconfianza sobre el uso que hacen estas compañías de sus datos (hasta un 42% se muestra “indiferente”). Idéntico porcentaje (15,5%) muestra su insatisfacción con la calidad de estos servicios, en comparación con llamar por teléfono, que solo muestra un 8% de insatisfacción.
Satisfacción con llamar o vídeollamar por Internet (WhatsApp, Skype, etc) (porcentaje de individuos)
En donde si existe un rechazo contundente es la falta de interoperabilidad entre este tipo de plataformas. Es conocido que para usar Zoom, TEAMS, Skype o WhatsApp, ambos comunicantes deben tener instalada el programa propietario; a diferencia de las llamas fijas o móviles, que son siempre operativas con independencia del operador contratado.
Valoración de posibilidades de interoperabilidad de los servicios (porcentaje de individuos)
Acabamos este breve apunte con otra constatación vox populi3https://www.lavanguardia.com/local/barcelona/20210502/7422662/cabinas-telefonicas-extinguiran-apenas-un-ano.html: nadie usa ya las cabinas:
Uso de cabinas telefónicas durante los últimos 12 meses (porcentaje de individuos)