En el día de hoy la empresa nos ha presentado una Prueba Piloto que ya se está realizando, enmarcada en un Plan de Telefónica de transformación del canal comercial de Venta Directa, FFVV.
La duración de este piloto será desde el 22 de junio al 31 de julio.
Este Piloto es primordialmente formativo en habilidades para realizar televenta. El objetivo es llegar a la certificación que se pide mensualmente e incide directamente en el SRV en caso de no llegar a las ventas solicitadas.
UGT ha comenzado su partipación exponiendo lo que todas y todos nos habéis trasladado, el excesivo foco que se está poniendo en las ALARMAS como elemento fundamental a la hora de llegar a objetivos. Entendemos que este producto sea considerado estratégico como fruto de una decisión empresarial que contemplaba la adquisión de otra empresa. Lo que no entendemos es que todo el SRV gire en torno a la consecución de una venta que se exige para el efecto multiplicador x3 de otros productos que han rebajado considerablemente su cotización en caso de no llegar. Nos parece injusto y desproporcionado, sobre todo por la dificultad que tiene la venta de este producto por teléfono. A esto se suma la incorporación de clientes nuevos a las carteras, que dificulta enormemente la labor, ya que esta venta precisa de un alto nivel de confianza con el cliente, además de contar con otro handicap que sólo se puede comercializar a empresas con CIF A ó B, reduciendo de esta manera el público objetivo, todo lo dicho, sin olvidar la presión a la que se está sometiendo la red comercial.
Por otra parte, UGT ha manifestado la necesidad de una formación acorde con lo que se pretende, que es mejorar las habilidades de las y los comerciales cara al desempeño de su trabajo. Esperemos que sea así, ya que nos habéis trasladado muchas quejas con respecto a la formación inicial. La formación debe de ser y es un pilar esencial para mejorar en todos los ámbitos. Si esta “ transformación” se quiere llevar a cabo con éxito, hay que apostar por una formación de calidad, y por supuesto dentro del turno de trabajo.
UGT, ha preguntado a la empresa cuándo se iban a recuperar las visitas presenciales, ya que existe cierto temor a que el colectivo deje de ser presencial para convertirse en otro “Inside Sales”, que movidos por el éxito de las ventas conseguidas en el confinamiento, (recordemos gran parte de ellas han sido propiciadas por ofertas lanzadas antes del estado de alarma), tal vez existiera la tentación por parte de la empresa de dejar de visitar a los clientes ya que operativamente pudiera ser más rentable. Para nuestra tranquilidad nos han dicho que se va a un modelo mixto, con llamadas y visitas . UGT NO va a tolerar en ningún caso que este canal pase a ser un canal de televenta.
La empresa ,aún no tiene la respuesta, de cuando se va a recuperar la actividad presencial, ya que según nos informan se está llevando a cabo el desescalado que ha marcado Telefónica para los departamentos comerciales a excepción de nuestas tiendas, que como sabemos ya están incorporando a todos los colectivos salvo los de riesgo.
Para concluir, demandamos que se revisen y se modifiquen los siguientes puntos que son a nuestro entender el malestar que tienen en este momento las y los compañeros FFVV.
- Aplicación de las medidas de PRL. No se dispone de un puesto acondicionado en la actualidad para realizar correctamente el trabajo. Las y los comerciales se quejan de dolores lumbares, epicondilitis,problemas musculo esqueléticos, etc., fruto de que las sillas que están utilizando no cumplen las medidas ergonómicas básicas, además de problemas de visión motivado por tantas horas frente a la pantalla del ordenador.
- Revisión del tiempo de trabajo y desconexión digital. Las y los comerciales se quejan de que tienen horarios que exceden las 9 horas diarias casi todos los dias, incumpliento lo que marca nuestro convenio laboral. Hay que revisar los tiempos de trabajo ya que la conciliación es imposible cuando se está todo el día enfrente de un ordenador o pegado al teléfono.
- Revisión de los objetivos del VOCA y por ende del SRV. En estos momentos para certificar se piden unos objetivos muy elevados, además de los cursos, llamadas, exámenes, etc., a lo que tenemos que añadir la venta de al menos una alarma para el efecto multiplicador, ya que, si tampoco se consigue certificar, las comisiones se quedan en algo pírrico y desmotivador a todas luces.
Como conclusión, decir que si queremos recuperar el pulso del canal y la motivación necesaria para que este colectivo lleve a cabo su trabajo de la manera más profesional, es necesario que la empresa comience a tomar buena nota de lo que hemos dicho, comenzando por rebajar la presión y continuando por presentar un SRV acorde con el esfuerzo que están realizando.