La Comisión Europea acaba de publicar los resultados de la consulta pública sobre contribución justa que puede cambiar el futuro de nuestro Sector. Sólo cinco sindicatos europeos participaron, y únicamente uno fue español: UGT.
Europa parece al fin dispuesta a cambiar el marco regulatorio que tanto daño ha hecho a nuestro Sector. Una muestra de ello fue la publicación de una Consulta Pública, durante la primavera de este año, con el significativo nombre “The future of the electronic communications sector and its infrastructure”.
Nuestro Sindicato, convencido de que cuando se toman decisiones, hay que participar e influir en el proceso, y más cuando tiene una afectación tan importante sobre el empleo y su calidad, acudió a la misma con el objetivo de compartir con Bruselas la necesidad de dar un golpe de timón a la actual regulación.
UGT ha sido el único sindicato español en participar. De hecho, solo cinco sindicato o agrupaciones profesionales ha participado en el proceso, una situación que, sin duda, no es la mejor para los intereses de los que componemos este sector.
En nuestra respuesta, UGT ha denunciado la sistemática destrucción de empleo tecnológico que sufre nuestro sector, a nuestro entender, como consecuencia regulación sectorial obsoleta, ineficaz y asimétrica, y de cómo los beneficios de la digitalización acaban en manos de unos pocos, residentes habituales de paraísos fiscales. Por supuesto, también apoyamos una contribución justa de los OTT al despliegue de infraestructuras digitales en nuestro país, lo que revertiría en un aumento del empleo y del talento digital, en mejores salarios y cotizaciones, y por tanto, en mayor consumo interno y en la sostenibilidad de nuestro sistema de pensiones. Porque como ya hemos apuntado en anteriores ocasiones, hablar de contribución justa es hablar de empleo y de reparto de la riqueza.
Las conclusiones de Bruselas coinciden con las propuestas de UGT y asumen un cambio regulatorio que puede ser definitivo: la promulgación de una nueva Ley de Redes Digitales
Las primeras conclusiones de la Comisión Europea a dicha consulta pública, difundidas hace escasos días, apuntan hacia un cambio, hacia una nueva forma de hacer las cosas en la misma dirección de las propuestas realizadas por UGT. Así, Bruselas propone confeccionar un nuevo modelo de financiación de redes, que se sustanciaría en una nueva Ley de Redes Digitales. A la par, comprende la necesidad de acabar con la perniciosa fragmentación del sector, no sólo permitiendo las grandes fusiones paneuropeas, sino protegiendo a las operadoras del continente ante OPAs hostiles.
Finalmente, y de nuevo admitiendo las propuestas de UGT, la nueva Ley deberá volver a poner a los operadoras en el centro de la innovación tecnológica, en aspectos clave como la IA, la computación cuántica o la realidad virtual.
Las primeras impresiones de la CE han sido bienvenidas por las principales patronales del sector, pero exigen la aceleración de la nueva Ley de Redes Digitales, una propuesta lógica si pensamos que llevamos esperando décadas por este cambio regulatorio.
UGT va a continuar opinando, participando e influyendo en este importantísimo proceso. Aquí en España, en Bruselas, ante reguladores y legisladores de todo tipo y pelaje. Porque permanecer expectante o inane no es una opción: nos estamos jugando el futuro de nuestros empleos.